Con el uso temprano de los celulares y la irrupción masiva de las aplicaciones, se registró un alarmante aumento de casos de suicidio desde 2010 hasta el 2020. Telenoche recopiló algunos de ellos para visibilizar esta problemática que preocupa cada vez más a las familias.
El uso temprano de los teléfonos inteligentes, la cantidad de horas en pantalla y las redes sociales sin control están haciendo estragos en niños y adolescentes. Las tasas de ansiedad, depresión y suicidio aumentaron desde su irrupción. En ese contexto, los especialistas aseguran que si los efectos físicos y psicosociales no son abordados a tiempos, pueden generar trastornos más graves.
Esto se ve reflejado en los datos del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades y Centro Nacional para la Prevención y Control de Lesiones de los Estados Unidos, que registraron el crecimiento de los casos de suicidio un 91% en varones y un 167% en mujeres desde el 2010 hasta el 2020.
De hecho, se registraron dramáticos casos de adolescentes que se quitaron la vida a raíz de un desafío de TikTok, o luego de que se viralice un video o foto íntima o incluso tras un escrache en redes por una falsa denuncia de abuso. Telenoche recopiló algunos de ellos para visibilizar esta problemática que preocupa cada vez más a las familias.
Viralización sin consentimiento de un video íntimo: el suicidio de Ema Bondaruk
Hace menos de dos meses, Ema Bondaruk se quitó la vida en su habitación luego de la viralización sin consentimiento de un video íntimo de ella junto a un compañero de colegio.
La adolescente de 16 años regresó a su casa en Longchamps después de atravesar toda una jornada en el colegio en la que sus compañeros tenían un video íntimo suyo. Apenas cruzaron palabras sobre el tema en la familia. Al día siguiente, su mamá volvió de comprar y la encontró muerta en su habitación.
“Falta la música de Ema. Esas canciones que ponía a tope a las seis y cuarto de la mañana mientras se vestía para ir a la escuela”, expresó Laura Fernández, su mamá.
Ballena Azul”, el desafío que llevó a la muerte a Fausto Palavecino
En 2017, Fausto Palavecino tenía 16 años cuando intentó quitarse la vida para cumplir con el desafío de la Ballena Azul, un juego que nació en Rusia y se viralizó rápidamente por todo el mundo a través de las redes sociales. El adolescente finalmente murió después de un mes de internación, en Entre Rios.
En los meses previos, el padre del joven contó en los medios que había empezado a notar cambios muy fuertes en la personalidad del chico: “Luego de atar diferentes cabos, llegué a la conclusión de que estaba jugando a la Ballena Azul. Si bien no era muy abierto, en los últimos tiempos se encerró aún más. Empezó a usar muñequeras, pero en realidad se las ponía para taparse los cortes que se hacía en los brazos. Pasaba horas en las redes sociales, en especialmente de madrugada, que es cuando se inicia el juego”.
“Para nosotros era un ángel, muy familiero y pendiente de sus hermanos menores. Nunca nos imaginamos vivir esta situación”, contó Joel, hermano del adolescente.
El challenge mortal de Lara Tolosa Chanetón
Lara Tolosa Chanetón se disparó en plena clase del Colegio Nacional de La Plata y murió cuatro días después. La adolescente de 15 años había anunciado en social Voxed que filmaría su muerte.
“El jueves voy a suicidarme en la escuela y lo voy a transmitir por directo. Estoy muy decidida a hacerlo (…) Bueno les cuento. Voy a robarle el revólver a mis papás antes de salir para el colegio y pienso pegarme el balazo en la primera hora, así que, si no se quieren perder el directo, van a tener que estar atentos a las 7:50 de la mañana”, había expresado días antes del dramático final.
Una falsa denuncia de abuso con escrache terminó con la vida de Agustín Muñoz
Agustín Muñoz se quitó la vida luego de que una amiga suya, menor de edad, lo acusara públicamente de un supuesto abuso sexual. La chica lo escrachó en redes sociales, publicación que se viralizó rápidamente.
Aunque después se comprobó que la acusación era falsa y producto de “un momento de bronca y enojo”, el resultado fue trágico: el joven de 18 años se quitó la vida.
“Mi hijo murió con su corazón destrozado. Pido que se tome conciencia de que estamos jugando con algo muy delicado”, Silvina Cast, su madre.
Jordan DeMay, el caso de grooming que sacudió a Estados Unidos
La historia de Jordan DeMay sacudió a Estados Unidos. Dos hermanos nigerianos-de 20 y 22 años- contactaron al adolescente de 17 años haciéndose pasar por una chica de su edad y después lo extorsionaron durante seis horas: le dijeron que iban a difundir sus fotos íntimas.
“Recién 48 horas después, cuando Instagram recuperó la conversación que mi hijo había borrado de su teléfono antes de suicidarse, atamos los cabos sueltos. Supe que mi hijo había sido víctima de una extorsión internacional, que lo llevaron al límite en poco tiempo. Lo arrinconaron hasta que ya no quiso seguir viviendo”, Jenn Buta, madre de Jordan.
Del bullying al algoritmo manipulador: la trágica historia de Marie
En Cassis, Francia, Marie sufría acoso escolar. El algoritmo de TikTok comenzó a sugerirle videos sobre suicidios luego de que ella posteara un video en el que expresaba su malestar. Semanas después se quitó la vida.
La abogada de los padres de Marie sostiene que la publicación que hizo la adolescente provocó que le llegaran una gran multitud de videos debido al algoritmo extremadamente potente que usa esa red social. “Es evidente que TikTok es en parte responsable del acto. Las plataformas, las redes sociales, desempeñan un papel frente a un adolescente que ya se encuentra en un estado psicológico extremadamente frágil como consecuencia del acoso al que se ve sometido”, declaró Laure BoutronMarmion.